Dulce Et Decorum Est
Bent double, like old beggar under sacks,
Knock – kneed coughing like hags , we cursed through sludge,
Till on the haunting flares we turned our backs
And toward our distant rest began to trudge.
Men
marched asleep. Many had lost their boots
Of
tired, outstripped Five- Nines(a) that dropped behind.
Gas ! Gas ! Quick boys! – An ectasy of fumbling,
Fitting the clumsy helmets just in time;
But someone still was yelling out and stumbling
And
flound’ring like a man in fire or lime...
Dim, through the misaty panes(b)and thick green ligth,
As
under a green sea. I saw him drowning.
In
all my dreams, before my helpless sigth,
He
plunges at me, guttering, choking, drowning.
If
in some smothering dreams you too could pace
Behind the wagon that we flung him in,
And watch the white eye writhing in his face,
His hanging face, like a devil’s sick of sin;
If
you could hear, at every jolt, the blood
Come garglin from the froth-corrupted lungs,
Obscene as cancer, bitter as the cud
Of
vile, incurable sores on innocent tongues,-
My
friend(c) you would not tell with such high zest
To
children ardent for some desperate glory,
The old
lie: Dulce et decorum est
Pro patria mori.
Oct.1917-Mar.1918
DULCE
ET DECORUM EST (a)
Doblemente
encorvados, como viejos pordioseros bajo los sacos
Aporreados –Acodados
para toser como hechiceras, maldecimos atravesando el barro
Hasta que encendidos
por la obsesión volvimos nuestras espaldas.
Y en dirección a
nuestro distante descanso comenzamos a caminar.
Los hombres marchaban
dormidos. Muchos habían perdido sus botas
por el cansancio.
Rezongaron Cinco –Y por esta causa Nueve(b) cayeron detrás.
¡Gas! ¡Gas! ¡Rápido
muchachos!- Un éxtasis de tonterías.
Ajustarse los
incómodos cascos en el momento preciso.
Pero alguno
continuaba dando alaridos y tropezando
Y forcejeando
atropelladamente, como un hombre en fuego o pegamento...
Oscuro a través del
cristal de la ventana y de la espesa luz verde;
Como bajo un mar
verde Yo lo vi ahogarse.
En todos mis sueños,
ante mi visión acongojada se
Zambullía en mi.
Goteando, sofocándose, anegándose.
Si en algunos
asfixiantes sueños marchábamos
Detrás del vagón, nos
echábamos en él
Y vigilando con el
blanco del ojo se retorcía su cara,
Su cara colgada como
los pecados de un demonio.
Podías escuchar que
en cada sacudida, la sangre
Hacia gárgaras desde
la corruptes espumante de los pulmones.
Obscena charla del
despreciable; como un cáncer amargo como
Incurables llagas en
lenguas inocentes-
Mi amigo (c) vos no
dirías con tal gran gusto
A los niños que arden
por algo de desesperada gloria,
La vieja mentira:
Dulce et decorum est.
Pro patria mori(d)
Oct.1917-Mar.1918