1 Heliofanía
la imagen abalorio
de vocablos que al sol
de la mirada
fenomenece. Su poder
de motor detona en pleno vuelo luz metal
esquirla lluvia fractal bajo nubes
de luto y de rutina. Rasga como
gasa en un clavo del banco y deja su
visión resplandeciendo. Neísimo
barroco que madeja en el huso
asesino belleza
que se oculta lectura de
consola tortuoso
organograma pide el
gatillo-dedo del logófilo Cazadora
de altura pescadora
de aljaba pichones
que le huyen al
venablo.
Arqueramazona feroz dulce que
adormece y cría el
poema contra el pecho que falta.
Heliofanía
la imagen su poder
de motor que detona
en pleno vuelo abalorio
de vocablos al sol de
la mirada fenomenece
2 Aludo aludo aludo lúdica y voraz el traste encima de la silla La vida impresa pasa por mi paladar adentro de la boca para afuera Aludo aludo aludo el bicho que me pica y cita. La sangre de la roncha convoca azul de tinta marfil de mi teclado y la teoría Aludo aludo aludo No puedo no aludir hago lugar a la vuelta de la noria que memora esperando encontrar la luz del guiño verde al otro lado del tablero.
3 despotrico
y el grito se escapa
por la loma del tejado despotrico
y la ira no hace
rimas de risa despotrico
y los cascos harían fuga de mí
misma despotrico
y la cría de mi voz se
desyegua en víctima si pasa la
estampida si
caballos de luz trapearan
la mugre habría
hierba y arroyo en la
llanura…
4
Rollo de mar vivo
que me brilla
en catorce pulgadas.
Agua de poemas en la luz
(filiación desconocida
no hay rostro editorial
colofón ni pies sobre la tierra
de la imprenta)
Aserrín de tesoros
con el mapa del azar
en los teclados
-bitácora de locos
en el tedio de una noche.
Rollo de mar vivo
en un mar de colores
que chillan en silencio.
La pureza de los grafos
¿me busca o yo la busco?
La noticia justifica estos relojes.
Una frase en el hueco del instante...
Tomo el lápiz, firmo el acta del hallazgo
y a mi espalda un zumbido,
torbellino en ojo rojo
dice más y más y más.
5 Es jueves, el poema se plaga de intertextos no es París, viva estoy pero el hueso redondo no profiere: aleluya desierta cascabel de lana cairel de cartón en la punta de las letras no hay más que un tedio sin la luz con la luz de la pantalla frenesí de payasos estruendo de pupilas estallido en la oreja marcan un silencio que anega el pentagrama. Este jueves, la punta de las letras lacera mi pulgar lleno de sangre la yema de mis índices y amenaza la lluvia.
6 Laberinto de atajos. Unos lobos de tiempo aceleran el paso. Llegar antes (la muerte es avatar) Pongo la mano derecha contra el muro sin despegarla recorro corredores. (es receta infalible, verifico) Irredenta,
me hechizó la hiedra tapiz de mil dibujos escudo de aquiles aleph que no descansa. Leí con la mano casi todos los libros, mis yemas llevaron al cerebro casi todas las músicas y las formas
se agotaban para complacerme. Y allí me quedé. A veces me suelto paseo con la mano izquierda y me pierdo gozosa. Cuando llegue
y se abra el espacio en el fin más exacto llegaré también,
en la punta de las letras.
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