tomarse la vida

A PECHE

 

TEXTOS POÉTICOS DE JORGE FALCONE

 

 

  

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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Que el dolor descanse

 

Al siempre Jorge Falcone

 

Que la rabia no venza

Que el dolor descanse

La venganza se quedó dormida

La dignidad se erigió segura, otera

Y hay tiempo, ya despertará el pueblo

Que hable la calle con el rugido de las pancartas

de ojos cristalinos

Las paredes, que cuenten sus trasnochos

Contamos con ellas

Que el día desabotone su camisa

Que los tatuajes abran sus persianas

Que el dolor descanse.

 

Eliso Mago,

militante revolucionario bolivariano,

05 de febrero de 2009.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

PREFACIO – FUNDAMENTO

 

“Dí tu palabra y rómpete”.

 

Federico Nietzsche

 

El título de esta antología, estimad@ lector/a, combina la expresión popular “tomarse la vida a pecho” (en serio), con un tácito tributo al entrañable poeta, intérprete y amigo Peche, que pasó por ella ráuda e intensamente. En efecto, Hugo “Peche” Estévez,  fue un talentoso autor y cantante reconocido por los aires nuevos que le dio al tango como líder del grupo Buenos Aires Negro (http://www.youtube.com/watch?v=_-bmHmEYOlg) Murió a los 48 años, en un trágico episodio doméstico. Por su hábito de hacer equilibrio sin red (y su temprana partida), alguna vez lo bauticé el “Camarón de la Isla” de nuestra música ciudadana. Pelilargo, flaco e imponente a la vez, se abría la camisa, escribía y cantaba como vivía: siempre al límite, con una voz lastimosa y dulce. Porteño y padre de tres hijos, Estévez fue el motor de esa apuesta musical que urdió en 1997 junto al trompetista Ricardo Culotta para dotar al tango de una sonoridad poderosa y de una lírica rabiosa. Desde una cuerda de vientos, pero también con batería, bandoneón y guitarras, el conjunto caminó el under porteño para exhibir una nueva síntesis estética capaz de incomodar, despertar y proponer. En 2000 concretó su debut discográfico con Turra vida, un trabajo que contiene piezas que merecen integrar una antología urbana de estos tiempos, como “El resentido”, “Buenos días Buenos Aires” y “Tren”. Sin detener su trajinar por escenarios formales y festivales diversos, se burlaba de las etiquetas: “No me importa si lo que hacemos es tango o es rock. A veces digo que es tango para enojar a los que se creen sus dueños, pero elijo que mi disco esté en una batea de rock. Ahí van los jóvenes, que son los que me interesan”. Para graficar su postura (y la de su banda) frente al mundo, señaló en 2009: “Lo nuestro tiene el gusto de acá porque uno vive acá, y si resulta extraño o particular es porque la mayoría de las bandas tocan y cantan como si estuvieran allá y miran el mundo parados allá. Cada uno se para donde quiere. Yo estoy en el Río de la Plata, tengo los pies descalzos en este barro y miro el mundo desde acá, entonces qué voy a contar si no es lo que veo todos los días”. Por aquel año, Buenos Aires Negro llegó a su segundo disco, titulado Sol de Once, donde Peche se dio el gusto y el lujo de contar con la producción del ya mítico Chango Farías Gómez. Una noche, en La Forja de Flores, pasado de alcohol, lo vi tratar de aliviarse tomando vodka con Hepatalgina. Hace poco recorrí Italia de norte a sur con una cámara a cuestas, ida y vuelta, tras la huella de otro poeta desaforado: El gigantesco Pier Paolo Pasolini. De extracción proletaria, y a menudo desbordado por su capacidad de indignación, Peche bien podría haber sido un personaje suyo. Cada vez que escucho el estribillo coral infantil y cuasi sacro de su irrepetible tema “Asesino”… vienen a mi memoria las más crudas imágenes del también malogrado realizador boloñés. Estos textos han sido concebidos "mateando con Pechito". Para extrañarlo menos, carajo.-

 

 

El autor

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MARISAL DE ALEJANDRÍA

 

Anoche viajé con Alejandro De Sio

a bordo de un carromato y retozando

como dos campesinos medievales,

cual Gargantúa y Pantagruel acaso,

pero hablando de Proudhon

(aunque, de anarquistas,

nosotros nada)

Lo que ahora más recuerdo es

el sol y la alegría.

Mas tarde visité a Marisa Wagner,

también resplandeciente y conviviendo

con un loquito manso

que la mima y la cuida,

ya nunca más a la intemperie

que acechaba a

las puertas del Bar “La Forja”,

cuando antes de abordar la madrugada

en voz baja consultaba

“¿está en pareja el

compañero Maissa?”

Entonces - pienso –

quizá los compas habitan el sueño y

no otra comarca sino esa

es nuestra Shangri - La,

nuestro Eldorado, Hiperborea...

Sonríen aún en la napa más honda

de una conciencia que abonará

el humus no sin antes

viralizar su memoria en

el afecto de unos cuantos.

Como supuso Ermanno Cavazzoni

en Il poema de i lunatici,

su voz arriba desde el fondo

más profundo del aljibe nuestro,

donde por fin ya todo es calma,

apacible mañana, y se ignoran

el desprecio y la bofetada.-

 

 

 

 

 

 

 

 

FATHERLAND

 

¿Cómo estamos hoy, papá?

¿Unidos o como siempre?

Se va la vida y deja atrás

tu rostro sobre mi espejo,

según pasan los años

va apareciendo el abuelo.

Te banco la buena fe,

pero - qué pena -,

ya está muy lejos

tu copa medio llena.

¿Te acordás de la palabra "ruin"

semantizando mis macanas

con una erre que sonaba

casi como una frenada?

A medida que adelgazás

tu compañera se ensancha.

Este hijo, que aún respira,

imita tu honestidad

más no le pega a las damas.

Hasta tiene bajo control

sus más violentas descargas.

Pero daría lo que no tiene

por un porrito contigo,

hacer las paces de una,

y volver a ser tu amigo:

No es fruto de mi desidia

la pampa que te abraza

sino de una convicción

profunda y americana.- 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

APOCALYPSE NOW

 

El día en que cundió la alarma

el aire ardía en la garganta.

La ciencia lo había advertido,

la ficción profetizado.

No obstante asombró con creces

ver flotar a tantos peces.

Hubo rayos en el mar,

el trópico vio nevar...

A pesar de tantas perlas

ninguno vio el collar.

Ni sonaron trompetas

anunciando ese final.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

SOLILOQUIO A LA QUE HORNEABA EL PAN

 

Hay cosas que sólo hablo con vos,

mi entrañable Eva Gorñac,

parejera de humildes primaveras,

sobreviviente

del largo invierno patronal.

Con vos, gorda,

que sólo contás

con un holgado sweater beige,

un gastado joggings aceituna y un par

de alpargatas color azul para presentarte en sociedad

encendiendo un horno embarazado de harina

de trigo presta a alumbrar

el pan del pueblo una vez más,

gratuitamente como el barrio sabe

que es tu manera de amar,

vos que - como yo -

a menudo no tenés con quién charlar

a corazón abierto para interpretar

los desafíos que la Historia ofrece.

Hablo con vos porque conozco

tu estirpe de hembra bagual

curtida en barro y solidaridad:

No es fácil distinguir la obesidad

de la hinchazón de Patria que te hace caminar

junto a los morochitos que alimentás.

Por eso te hablo sin ocultar la furia,

acumulada viéndote fumar, fumar...

para enterarme luego que justo vos

tirás la toalla en una prefabricada

adonde nadie te va a visitar.

Cómo no hablarle entonces

a esta foto que siempre tengo a mano

alimentando un odio que construye.

No soy un solo, Eva,

soy bestia aluvional.

Y ya no puedo soportar

el show de la tilinguería,

la impostura nacional - popular

cacareada desde una banca que, aún en la zozobra,

ya tiene asegurado un buen pasar.

Me empecino pues en no descarrilar

desde esta ochava de la suerte que nos toca

quemando viejas fórmulas en la pira

que me abriga mientras intento averiguar

los nuevos paradigmas de una vieja lucha,

su emergente sujeto social,

la máscara más flamante

del enemigo ancestral.-

 

A mi hermana Mabel Sampaoli,

a l@s compas de Barrio Elizalde.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

YA VISTE EL MAR

 

Ya viste el mar,

hijita de mi hija,

ya te mojó su sal,

diminuta andarina.

Ya viste el mar,

- andá sabiendo -

él es un animal
que crece y se alimenta.

Ya viste el mar,

cuna de las especies.

La arena en que jugaste

también fue ser viviente.

Ya viste el mar.

Pido que lo recuerdes,

que siga allí,

y que cambie su suerte.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MÍNIMA, VITAL, Y MÓVIL

 

Sembrada a flor de césped

nutriendo ligustrinas,

de tanta noestariedad

te estoy soñando aburrida,

y al instante en que despierto

vuelvo a creer que es mentira.-

 

 

 

 

 

 

 

 

PENSAR QUE PUDO LLAMARSE ANDRÉS

 

"Como un guardián

le veo pelear

siempre jugándose los sueños

por mi bien"

 

Andrés Molina

(fragmento de la canción "Quemarse los pies")

 

Ya no recuerdo al mundo

que precedió este encuentro

y sin embargo tengo

presente mi recelo,

ese que fui

llegando con cautela,

escatimando al otro

nombrar el sentimiento,

dilatando firmar

aquel contrato

(acaso comprendí

durante aquellos días

cuán poco puede

decir la poesía)

A veces la pasión

se templa a fuego lento,

y sin pedir audiencia

elige su momento.

Pero pasado un tiempo y,

sin ningún precedente,

no queda adversidad

a que no hagamos frente.

Sabe ahuyentar

las sombras que me acechan,

busco su abrazo

cuando la tierra tiembla.

Me sabe a poco

el tiempo en que no llega,

peno hasta la mañana

cada vez que se acuesta.

Tanto que no hallo modo

de explicarme a la sazón

la saga previa

de este roto corazón.

Y a menudo me detengo a

pensar que pudo llamarse Andrés,

más quiso mi destino

que naciera mujer.-

 

 

 

INDICIOS

 

Dicen que el hombre moderno nació en África

(la mujer también, pero todavía

estamos resignificando aquel concepto

patriarcal con que hasta ahora

se aludió a la “humanidad”)

Sucediste al heidelbergensis

(ignoro qué secretos encierra esa afirmación)

Las científicas que te describen

más alto y ancho que nosotros

ven en ti a un paradigma de virilidad

(cuentan que una mandíbula nuestra

cabe dentro de la tuya)

Sos el arquetipo del cavernario

que acuñó el Séptimo Arte,

yo conocí tus restos en el museo

de la ciudad en que nací,

fundado por Ameghino.

También dicen que fuiste escaso,

nómade,

y que luchabas

cuerpo a cuerpo con bestias feroces

pues no conociste el proyectil.

El fuego te hizo un poco más grata

esa existencia a puro stress

sufriendo cuanto ignorabas,

más no sabías producirlo…

He sabido a su vez que,

primario como te pintan,

enterrabas a tus muertos;

y consta que a menudo

lo hacías con ofrendas.

Y me ha emocionado saber,

abuelo Neandherthal,

que en esqueletos de tu tribu hallaron

huesos quebrados de alguien

que sobrevivió soldándolos.

Me enternece saberlo porque dicen

que eso sólo es posible

si hay a tu alrededor

semejantes que te cuiden.

Escribo estas líneas

acaso extemporáneas

un marzo del Tercer Milenio

en el que, como es costumbre,

los argentinos evocamos

a ciertos especímenes de homo sapiens

que llevaron al paroxismo

el arte de martirizarnos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

YO TRATO DE VILLAR

 

Esta esquina me recuerda a vos.

Yo nunca averiguo nada.

Dialogo con mi memoria,

que es ficcional y arbitraria.

Allí te les fugás

o caés simulando

desenfundar un arma.

(se ha dicho tanto, caray…

y aún no sabemos nada)

Cuando cantás,

otra voz contracanta:

Nunca sabré

de quién es la garganta.

Cuando penás,

tu hija también te extraña.

Para ella fue

todo lo que soñabas.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CUANDO MI VIEJO VEÍA A LOS TRES CHIFLADOS

 

Cuando mi viejo veía a Los Tres Chiflados

la lucha de clases se abolía por un rato.

 

Salía agua por las hornallas,

resbalaba un mulato.

 

Roncaba piando Shemp

o a Curly lo escupía un pato.

 

Y nadie dudaba que

el serrucho de Moe era falso…

 

“Recuérdame asesinarte”, y quedaba

con un mechón de Larry en la mano.

 

Cuando mi viejo veía a Los Tres Chiflados

nuestro mundo era todavía manso.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MIENTRAS TANTO

 

En estos días sin Revolución,

sin pueblada que estremezca,

sin acuerdos mínimos ni

pensamiento crítico siquiera,

¿dónde está quien pidió armas

a las tropas leales,

quien fue capaz de

tomar un frigorífico,

quien hizo recular a la montada, y

hostigó con una valla La Rosada?

¿Por ventura es el padre

de la beba atropellada,

que ahora llora su bronca

frente a una seccional rodeada?

¿El rockero compactado

en el tren descarrilado?

¿Acaso la matada

por linda, y también grabada?

O peor: ¿El que evacúa

la rabia acumulada,

su incomprensión de Patria lastimada,

contra el morocho que merodeaba?

La neblina que hoy se alza

entre un arco y el de enfrente,

¿en bajar cuánto tarda?

 

 

 

 

 

 

 

 

TERRONI (*)

 

"Possono stare in letargo per anni, per decenni, a volte per secoli; ma quel che conta é che tanto il Popolo quanto il Potere devono sapere chei Briganti ci sono ancora! Il Popolo per continuare a sperare, il Tirano per continuare a temere".

 

Reivindicación de los bandoleros sociales antimonárquicos de la región de Basilicata, Italia, leída en un muro de Potenza.

 

Yo conocí gitanos finlandeses

vomitando en los sistembullagets (**)

de Barrio Tensta cuando me tocó en suerte

ser un "svarta skalle" venido del sur (***)

Supe más tarde qué significaba

ser vallecano en la tierra de Lorca,

potosino en la de Katari y

pihurano en la de Manuel Scorza.

Hoy piso el suelo de mis mayores,

donde amasó Rosina antes de huir al Plata

como más tarde hizo Don Vincenzo.

En esta latitud distante

del mundo fashion

y el prototipo Ken - Barbie,

adonde es piedra caliza el

lecho del río y

el castillo abandonado

se ha vuelto trattoria:

Pueblo moro, que no alemán;

segregado como en otro Viet Nam.

Le arrebataron la lírica del Dante,

el visionario sueño de Da Vinci,

la pasión libertaria de Fabrizio,

el coraje civil de Pasolini.

Centuriones de un Imperio que no existe

sudando alrededor del Coliseo,

cargando bultos en la Stazione Termini,

la mano tendida en pos de un euro.

También provengo, Señor,

del meridión de las cosas:

¡Guarda tu Edén para el que aún te reza!

Sigo soñando con lo que nos niegas.-

 

(*)  Gente de la tierra: Apelativo peyorativo con que designa la Italia septentrional al hombre y la mujer meridionales.

 

(**) Argentinización del vocablo sueco que significa "enoteca".

 

(***) Cráneo negro: Voz peyorativa sueca que equivale al "cabecita negra" de la Argentina.

 

 

A la memoria de Don Vicente Falcone, natural de Corleto Perticara (Basilicata)

y Rosa de Leo, oriunda de Cercchiara di Calabria,

cuya sangre corre por nuestras venas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

ME GUSTA MI CARA DE VIEJO

 

Me gusta mi cara de viejo,

este mapa de mí que devuelve el espejo.

En ella encuentro mucho del abuelo

y un algo también de mi viejo.

 

Llevo la marca de la furia en el entrecejo,

esa credencial de lo que soy

que, a la manera de León Felipe,

me revela harto de cuentos.

 

Por nada del mundo borraría este hartazgo,

la bonhomía que de niño me acompaña,

este afán de meditarlo todo,

la picardía del último del aula.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

HAGAN SILENCIO

 

Hagan silencio,

no voy a repetirlo:

Mi hija mayor

está invocando a un niño.

 

Como aquel garbancito

germinado en la primaria,

la habichuela de Jack que buscaba el cielo

desde la humildad del aula.

 

Hagan silencio,

no quiero ser pesado:

la primera que ayudé a engendrar

ahora está empollando.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MERCÍ BEAUCOUP

 

En el CPU en que preservo,

a buen resguardo

mis más caros sueños,

ahí la conservo a usted

altiva, ancha de caderas,

enseñándonos francés.

La frente amplia, blanca la tez,

boquita roja y mentón pequeño…

convidándome a Brassens

¡De allí salté a René Clair!

A Leo Ferré, Boris Vian,

y por supuesto a Jacques Brel.

Usted me rescató

del Teatro de la Crueldad al que

su asistente me empujó.

Quizá por eso ha de ser

que desde aquellos días para mí

Roche no es un laboratorio, mademoiselle.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

NADIE ES INMUNE AL VACÍO

 

No me mientan.

Quien más, quien menos,

ha pensado alguna vez en el suicidio.

No digo “ido por la soga”

ni “colocado la hoja de afeitar

al borde de la bañera”.

Nomás pensado.

Mandado a todo y a todos

amablemente al carajo.

O gritado en silencio

“¿¿¿ahora qué más quieren???,

si ya me bauticé,

ha tiempo no contesto

- como exigía mi madre -,

y pago los impuestos

según la norma”.

¡Vamos!

¿Quién no se asomó

al borde alguna vez

y miró las tortugas…?

Acaso el ejercicio

de esta noble criatura

apenas consista en impedir

que nos arrastren hasta allí.

Amar con furia

y evitar la caída

fingiendo eternidad.-

 

A la memoria de Alejandra Pizarnik,

que se tuteó con el misterio.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

LA HORA DE LA FURIA

 

No consumo enalapryl

para tener la presión a raya,

más bien me lo administro

para dominar la rabia.

Ignoro cuán grave fuera

el daño que perpetraron

los que en Sodoma y Gomorra

murieron carbonizados,

más tengo algunas dudas

que en caso de confirmarse

justificarían – ahora sí -

que tu odio se desatase…

Tú que habitas la conciencia

de justos y temerosos

conteste deberías estar

de este presente pavoroso:

Suponiendo que en verdad

Ébola y SIDA fueran fruto

de la inocente criatura

que tu aliento trajo al mundo;

considerando un instante

que fuera cierto que acaso

la tragedia del World Trade Center

era un “error” calculado,

qué escrúpulo está frenando

que truene un nuevo escarmiento

contra este engendro que somos,

producto del peor sueño.

“Si quedara un solo justo

- dijiste aquel día a Abraham –

por amor a ese justo

perdonaría a la ciudad”.

¡Inténtalo de nuevo

si es  que todo lo ves,

hurga en el sur del hombre y

comencemos otra vez!

 

 

 

 

 

 

 

 

 

NO CORRESPONDE QUE HABLE AQUÍ,

NO CONVIENE QUE DIGA ESTO

 

En la foja de servicio

de una organización disuelta

mi nombre es IMPERTINENTE.

Aún me sigue como un sino

a cada sitio en que opino.

Busco y rebusco en

la alforja del presente,

sin ostentar verdades,

la pepita de un sueño vigente.

Sólo hallo

devotos de la fama o

secuestradores del fuego

que legó Prometeo.

Me falta mucha razón,

pero blindo la que tengo.-

 

 

 

 

 

 

 

MUERTOS

 

¿Habrá existido quien

no murió por la vida?

De ser así,

¿cómo se llamaría?

 

Muertos de la felicidad,

reza la melopea…

En tal caso, ¿porqué

casi todos dan pena?

 

¿Goza de buena salud

algún ausente?

¿Cómo es que nadie pues

lo ha visto rozagante?

 

Si el que murió peleando

vive en cada compañero,

¿porqué ningún setiembre

logro verte de nuevo?

 

Si no se llora y

se reemplaza,

¿porqué diablos ocurre

que tanto se le extraña?

 

 

 

 

 

 

 

CITA EN OPORTO

 

Al Maestro Manoel de Oliveira,

que inspiró mi primer documental genealógico,

y  sigue filmando a los 105 años.

 

Ya no quedaba resto de mí

cuando esta antigua pasión cinéfila

me arrastró hasta aquella salita de una

ciudad balnearia colmada de estudiantes.

Deposité mi osamenta

por enésima vez en una butaca

y me dispuse a aguantar lo que viniera

(en los festivales no siempre queda entrada

para ver lo que uno quisiera)

El haz de luz mostró uno de los parajes

más subdesarrollados de Europa,

con el canto desgarrado que, según dicen,

entonan potenciales viudas para llamar desde el muelle

al marido pescador que se ha embarcado.

De pronto una factoría abrió sus puertas y,

como en 1895, vomitó obreros al fin de la jornada;

la cámara giró 180 grados y, enfrente,

un par de operadores movía la manivela

de una antigua cámara tomavistas:

El milagro sucedió de nuevo,

más no ya en Francia, en Portugal ahora.

Usted me rescató ese día sin conocerme.

Estaba a punto de rendirme y recordé

que la honda napa de la libido se encuentra

hurgando en las raíces.

Dicen que el vero gladiador

afronta la batalla a corazón deshecho.

Atento a la lección, querido Maestro,

yo puse proa hacia mi abuelo.-

 

 

 

 

 

 

 

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 Gracias a Jorge Falcone por el envio de este material.  Le doblamos la apuesta : que filme mas y que escriba mas tambien...